Hostatgem per primera vegada la periodista Pilar Rahola en aquestes Reflexions.No calen gaires comentaris. És molt explícit...:
¿Cómo puede Extremadura pagar becas de inglés en Inglaterra, siendo una comunidad subsidiada?
08/03/2012 - la Vanguardia Pilar Rahola
Tengo la impresión de que uno de los dos lados debe de ser extraterrestre. Y seguro que es el lado catalán, dado lo inhóspito del planeta España para nuestra marciana especie. Lo cierto es que los diálogos de sordos que protagoniza la Generalitat con el Gobierno del Estado llegan a tal punto de surrealismo que parece que se hablen desde galaxias distintas. ¿Cómo interpretar, por ejemplo, el rifirrafe parlamentario entre el diputado de CiU Josep Sánchez Llibre y el ministro Montoro? Porque aunque es cierto que hablaban en el mismo y castizo idioma, era evidente que uno de los dos utilizaba una gramática parda. Sánchez Llibre pidió al ministro que las autonomías tuvieran la misma flexibilidad en el déficit que se ha permitido el Gobierno central, es decir el 30% y no el 15% exigido. Y más teniendo en cuenta que son las autonomías las que deben pagar el grueso de los servicios públicos, léase sanidad, escuelas, policía, etcétera. Y el ministro le soltó el sermón de la montaña sobre esfuerzo común, compromiso con Europa y necesidad de demostrar que nadie se relaja en España. Y a partir de ahí, rasero común entre todas las comunidades, tanto las que hacen los deberes como las alegres comadres del despilfarro, que se permiten presupuestos expansivos incluso cuando están subsidiadas. Por ejemplo, ¿cómo es posible que el Gobierno valenciano pueda contratar a 1.800 profesores nuevos, siendo la comunidad más endeudada de España y habiendo sido rescatada por el Tesoro Público para poder pagar una deuda con el Deutsche Bank de 123 millones? Lo pregunto porque los catalanes no podemos. Y, en la misma línea, ¿cómo es que Extremadura puede contratar a 3.000 parados de forma directa, o pagar becas de inglés en Inglaterra en plena crisis y siendo una comunidad subsidiada? Lo pregunto porque los catalanes no podemos. Y suma y sigue...
Que, además, el ministro Montoro responda a las quejas de Sánchez Llibre, que le recordaba los esfuerzos del Govern, diciendo que "celebra" que Catalunya quiera competir en austeridad con el Estado es el colmo del recochineo. ¿Quieren entender algo? Porque las cosas son un poco bestias. Por un lado, tenemos un motor económico como Catalunya que sufre todo tipo de déficits insfraestructurales que ralentizan su competitividad, mientras han despilfarrado millones haciendo aeropuertos o llevando el AVE a sitios donde sólo suben los conejos; por el otro, sufrimos un déficit fiscal asfixiante que genera una también asfixiante dificultad económica; además el Estado que nos expolia se permite no pagar a Catalunya lo que debe a la vez que nos niega el derecho a una mayor flexibilidad con el déficit; y para rematar, somos uno de los territorios del mundo donde se paga más por renta del trabajo. ¡Qué más se puede pedir! Pues que se rían de nosotros en nuestra cara. Si somos tan tontos de permitir todo esto, es que debemos de ser muy cómicos.
Joan A. Forès
Reflexions
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