Benvolguts,
Un altre dels articles de l'Elisa Beni sobre el TJUE. I el duel com l'articulista explica és de diverses bandes. Cal saber si bandes té l'acepció de bandes de billar o bandes en el sentit de bandes mafioses o bandes de ministeris o d'organismes oficials o paraoficials.
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OPINIÓN
Duelo en el Gran Ducado
Elisa
Beni
Madrid. Miércoles, 26 de junio de 2019
4 minutos
"Son tantos
los desafíos de gente principal a esta parte, que el Conde Duque ha hecho un
papel para ver de extirparlos", Cartas de Jesuitas, XIV
Todo apunta a un duelo
jurídico a varias bandas que se producirá en los próximos días en ese tribunal
asentado en Luxemburgo en dos torres planas y paralelas que dan sensación de
poder cerrarse como un libro y atrapar al que se atreva a interponerse entre
ellas.
Sabíamos
ya que el caso del eurodiputado Puigdemont estaba a punto de caer en la agenda
del TJUE, será esta misma semana, pero bien creo que se están midiendo
los tiempos para asegurar un mejor resultado, y ahora sabemos que el propio Tribunal
Supremo no descarta la idea de acudir también a instancias del abogado de
Junqueras. Parece que esta vez no van a tirar a la papelera las cuestiones
planteadas por Van den Eynde y que explorarán la vía de la cuestión prejudicial.
Siguen siendo, como
siempre hasta ahora, dos vías distintas pero de las cuales alguna de las partes
que sostiene el duelo puede salir muy maltrecha según sean los resultados del
embate.
La
novedad es que el tribunal enjuiciador ha considerado que más vale dar traslado
a las partes de la petición realizada por Junqueras para plantear una cuestión
prejudicial “atendiendo a la posible incidencia del derecho de la Unión
Europea”, dice textualmente el tribunal, y en concreto el artículo 9 del
tratado que versa sobre privilegios e inmunidades. Así que, como poco, el
Tribunal Supremo ha considerado que no debe abortar el trámite ad initio y si
así lo ha considerado, por algo será. Cierto es que hay quienes piensan allí
mismo que no estaría de más preguntar porque el TJUE les daría la razón y así
cerrarían el episodio de una forma neta. Así que parece sensato pensar que sí,
que van a presentar la cuestión prejudicial, y resulta interesante ver quiénes
se oponen en rotundo siquiera a consultar sobre la legalidad de lo que se está
haciendo en Luxemburgo. La Abogacía del Estado va a oponerse a que se realice
tal consulta y lógicamente la Fiscalía no cambia de opinión. Esto quiere decir
que aún en el supuesto de que el tribunal enjuiciador decidiera tirar para
adelante, la cuestión prejudicial de Junqueras no llegaría a Luxemburgo antes
del lunes.
No serán
los más madrugadores en este duelo. Cuando la cuestión prejudicial arribe a
Luxemburgo, los magistrados del TJUE ya estarán ocupados con la situación de
Puigdemont que correrá mucha más prisa. A fin de cuentas puede que el Tribunal
Supremo haya pensado en que preguntando gana tiempo para que haya ya sentencia
firme condenando a Junqueras antes de que se pronuncien. Las espadas están en
alto y ya solo quedan siete días para que las puertas del Parlamento Europeo se
abran y sepamos si Puigdemont y Comin están sentados en el hemiciclo o no. En
España nadie piensa que esto sea posible, sus abogados están seguros de que
allí estarán. Pase lo que pase, tanta seguridad dejará a algún duelista
maltrecho y, en el caso de que sea el sistema español, el golpe no va a ser
pequeño.
La
confianza en la imposibilidad de que los expatriados acaben ocupando el escaño
que ganaron en las urnas debe basarse en la comunicación que la Junta Electoral
Central ha realizado oficialmente al presidente del Parlamento Europeo. Una
notificación firmada por el vicepresidente de este organismo administrativo, se
ignora por qué no lo hizo el presidente, en la que la JEC se arroga la potestad
de decidir quién es europarlamentario y quién no y en el que no sabemos si
cometen errores importantes o, simplemente, quieren engañar al Europarlamento.
En la comunicación oficial se incluye un punto segundo en el que se afirma que “se declaran vacantes sus escaños y suspendidas las prerrogativas que les
pudieran corresponder (...) hasta que se produzca el acatamiento”. Pero es que
en su punto tercero dicen que comunican al presidente del Parlamento Europeo
que Puigdemont, Junqueras y Comín “no han adquirido la condición de diputados
del Parlamento Europeo ni, por tanto, no han adquirido ninguna de las
prerrogativas que les pudieran corresponder”.
Y como no es lo mismo que unas
prerrogativas estén suspendidas que no se hayan adquirido, es esta comunicación
otro punto oscuro de los que se habrán de resolver... en Luxemburgo.
En todo
caso, más allá del derecho, resulta incomprensible que un organismo de la
administración electoral, sin ninguna intervención judicial, pueda dejar sin
efecto lo sustanciado en las urnas. Tal circunstancia extrapolada a estados
iliberales en los que las garantías están en tan serio riesgo que preocupan a
la Unión Europea, dejaría las manos libres al establecimiento de condiciones y
organismos que pudieran “purgar” el resultado de unas elecciones libres. Por
otra parte, ya hemos asistido al espectáculo de que osaran sacar de una lista
electoral a los mismos candidatos y de que fueran desautorizados por el Poder
Judicial. Ahora el duelo se juega aún en instancias más alejadas del furor
patrio. Sería muy grave que un órgano que ni siquiera es judicial pueda tomar
la decisión de cambiar la composición del Parlamento Europeo y hasta el
juego de mayorías.
El duelo está servido
y será internacional. Tal y como... no querían.
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