Por qué el bipartidismo se recompone y Podemos sigue bajando…,
José Oneto en República de las ideas
OPINIÓN
El Partido Popular ganaría las elecciones generales si se celebrasen ahora y se alejaría cuatro puntos en porcentaje de voto del PSOE (28,2%, frente al 24,9%), según el sondeo hecho público este miércoles por el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas), el tercero del año, en el que se nota una levísima recuperación del bipartidismo y un retroceso de los llamados partidos emergentes. Una tendencia que empieza a detectarse en otras en encuestas, como las que viene realizando el Instituto Metroscopia para el periódico El País. Igualmente los resultados indican que es difícil la formación de una mayoría estable, ya sea con el PP o con el PSOE, con acuerdos con Ciudadanos o con Podemos.
Si en el barómetro de abril, antes de las elecciones municipales y autonómicas de mayo, hubo una cierta alarma en las filas populares (que se confirmó precisamente con los resultados en esas elecciones) porque se había producido casi un empate técnico entre los dos grandes partidos (25,6% el PP y 24,3% el PSOE), en esta ocasión, ya hay un cierto despegue del PP del PSOE, despegue que se produce a costa de Ciudadanos que ha pasado del 13,8% de porcentaje de voto en el mes de abril a un 11,1%, tres meses más tarde. Es decir que los populares han arañado votos en Ciudadanos, cuando, hasta ahora, se estaba produciendo el fenómeno contrario, por lo que parece haber dado resultado el mensaje del miedo que se está extendiendo entre los votantes populares, que no fueron a votar en las elecciones autonómicas y municipales y ahora temen un vuelco político.
Sin embargo, no se sabe adónde han ido a parar (probablemente al PSOE) ese 0,8% que ha perdido Podemos que, este mes de julio, se ha colocado en un 15,7%, tres puntos por debajo que la encuesta que en julio hizo Metroscopia. Es decir que PP-PSOE ganan votos y Ciudadanos y Podemos pierden. El caso de Podemos es especialmente grave ya que parece estar desangrándose lentamente. Comparado con su mejor resultado, el pasado mes de enero, con una subida espectacular de nada menos que de un 23,9 por ciento de los votos, y situado dos puntos por delante del PSOE, y a cuatro puntos del PP, (algo que hizo concebir esperanzas a Pablo Iglesias de que la alternativa al PP no era el PSOE , sino Podemos) hay que señalar que en estos seis meses el partido ha perdido, ocho puntos, de los que no se recuperó en abril, ni ahora, en este sondeo del CIS de julio que ha seguido bajando poco, pero bajando.
Esa es la misma tendencia que reflejaba en julio la encuesta de Metroscopia según señalaba este cronista recientemente en esta misma sección en la que insistía en que la política de descalificación hacia Izquierda Unida, el agresivo lenguaje de Pablo Iglesias contra quienes no aceptan integrarse en Podemos, ese exceso de ambición que se le nota demasiado, la actitud despreciativa con la que Iglesias habla del resto de las fuerzas políticas, colocaba a Podemos, según Metroscopia diez puntos menos que el sondeo del mes de enero, cuando Podemos consiguió encumbrarse hasta situarse como la primera fuerza política del país, con puntas del 28 por ciento. En esa Metroscopia de julio igual que en ésta del CIS, Podemos se sitúa a cinco puntos del PSOE, y ya deja de ser esa alternativa al PP, algo que de forma mesiánica Iglesias ve inevitable y es lo que está impidiendo un acuerdo de toda la izquierda. Pero es que, además, Pablo Iglesias es el dirigente político peor valorado en el sondeo de Metroscopia, después del presidente del Gobierno Mariano Rajoy. El único que aprueba es el dirigente de Ciudadanos, Albert Rivera.
En la encuesta del CIS de hoy, en la que Pedro Sánchez es mejor valorado que el presidente del Gobierno, no aparece la valoración de los españoles a los líderes de Podemos y Ciudadanos, dado el criterio con el que trabaja el CIS de preguntar sólo sobre los partidos que tienen representación parlamentaria, con lo que no se puede establecer ningún tipo de comparación con otros sondeos o barómetros. Algo que hubiera resultado interesante y significativo…
El Partido Popular ganaría las elecciones generales si se celebrasen ahora y se alejaría cuatro puntos en porcentaje de voto del PSOE (28,2%, frente al 24,9%), según el sondeo hecho público este miércoles por el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas), el tercero del año, en el que se nota una levísima recuperación del bipartidismo y un retroceso de los llamados partidos emergentes. Una tendencia que empieza a detectarse en otras en encuestas, como las que viene realizando el Instituto Metroscopia para el periódico El País. Igualmente los resultados indican que es difícil la formación de una mayoría estable, ya sea con el PP o con el PSOE, con acuerdos con Ciudadanos o con Podemos.
Si en el barómetro de abril, antes de las elecciones municipales y autonómicas de mayo, hubo una cierta alarma en las filas populares (que se confirmó precisamente con los resultados en esas elecciones) porque se había producido casi un empate técnico entre los dos grandes partidos (25,6% el PP y 24,3% el PSOE), en esta ocasión, ya hay un cierto despegue del PP del PSOE, despegue que se produce a costa de Ciudadanos que ha pasado del 13,8% de porcentaje de voto en el mes de abril a un 11,1%, tres meses más tarde. Es decir que los populares han arañado votos en Ciudadanos, cuando, hasta ahora, se estaba produciendo el fenómeno contrario, por lo que parece haber dado resultado el mensaje del miedo que se está extendiendo entre los votantes populares, que no fueron a votar en las elecciones autonómicas y municipales y ahora temen un vuelco político.
Sin embargo, no se sabe adónde han ido a parar (probablemente al PSOE) ese 0,8% que ha perdido Podemos que, este mes de julio, se ha colocado en un 15,7%, tres puntos por debajo que la encuesta que en julio hizo Metroscopia. Es decir que PP-PSOE ganan votos y Ciudadanos y Podemos pierden. El caso de Podemos es especialmente grave ya que parece estar desangrándose lentamente. Comparado con su mejor resultado, el pasado mes de enero, con una subida espectacular de nada menos que de un 23,9 por ciento de los votos, y situado dos puntos por delante del PSOE, y a cuatro puntos del PP, (algo que hizo concebir esperanzas a Pablo Iglesias de que la alternativa al PP no era el PSOE , sino Podemos) hay que señalar que en estos seis meses el partido ha perdido, ocho puntos, de los que no se recuperó en abril, ni ahora, en este sondeo del CIS de julio que ha seguido bajando poco, pero bajando.
Esa es la misma tendencia que reflejaba en julio la encuesta de Metroscopia según señalaba este cronista recientemente en esta misma sección en la que insistía en que la política de descalificación hacia Izquierda Unida, el agresivo lenguaje de Pablo Iglesias contra quienes no aceptan integrarse en Podemos, ese exceso de ambición que se le nota demasiado, la actitud despreciativa con la que Iglesias habla del resto de las fuerzas políticas, colocaba a Podemos, según Metroscopia diez puntos menos que el sondeo del mes de enero, cuando Podemos consiguió encumbrarse hasta situarse como la primera fuerza política del país, con puntas del 28 por ciento. En esa Metroscopia de julio igual que en ésta del CIS, Podemos se sitúa a cinco puntos del PSOE, y ya deja de ser esa alternativa al PP, algo que de forma mesiánica Iglesias ve inevitable y es lo que está impidiendo un acuerdo de toda la izquierda. Pero es que, además, Pablo Iglesias es el dirigente político peor valorado en el sondeo de Metroscopia, después del presidente del Gobierno Mariano Rajoy. El único que aprueba es el dirigente de Ciudadanos, Albert Rivera.
En la encuesta del CIS de hoy, en la que Pedro Sánchez es mejor valorado que el presidente del Gobierno, no aparece la valoración de los españoles a los líderes de Podemos y Ciudadanos, dado el criterio con el que trabaja el CIS de preguntar sólo sobre los partidos que tienen representación parlamentaria, con lo que no se puede establecer ningún tipo de comparación con otros sondeos o barómetros. Algo que hubiera resultado interesante y significativo…
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